Tuesday, August 16, 2005

Punta Cuartel

En el mismo lugar que la armada chilena capturo al Huascar hoy se levanta una pequeña isla que es habitada por una colonia de lobos marinos de un pelo que dedican su vida a pescar y pelear con otros lobos por aparearse con la mayor cantidad de hembras posible.
En estos mismos parajes submarinos conviven pejeperros, tomollos, viejas, bilagais, cabrillas, borrachillas, pejerreles, lenguados, blanquillos, jerguillas y rollizos entre otros peces, quienes pasan la mayor parte del dia buscando comida y a su vez evitando ser comidos por lobos.
Entre estos riscos marinos cubiertos por locos, choritos, piures y almejas, nadan estos peces, escondiendose en cueva submarinas y montando emboscadas sobre peces de menor tamaño, escondiendose tras las rocas o cortando el agua a velocidades abismales ayudados por las corrientes.
En estas mismas aguas llenas de lobos es que el pescador submarino se sumerge en busca de la presa ezquiva, integrandose al mismo habitat y formando parte del ciclo, enfrentando un medio distinto, en el que ni siquiera puede respirar.
No conozco persona que se sienta comoda en el agua con animales de 2 mts y 300 Kg, aunque la mayoria de las veces resultan ser criaturas adorables e interesantes, mas preocupadas de sacar un loco de su concha que de ahogarte de un mordisco.
Asi los minutos pasan y se acortan, en la misma medida que se acorta la distancia entre el pez y la punta del arpon, que recorrio su brillante acero por grietas y cavernas hasta dar inicio a una persecusion que termina por alcanzar la presa y cerrar el circulo.

APNEA

"...existen tres clases de hombres: los vivos, los muertos y los que se hacen a la mar"